09/11/2017 11:49 AM
La regenta, de Clarín. Hace muchos años me obligaron a leerlo, quizá por eso se atrancó en mis entendederas.
Lo mismo me pasó con Guerra y paz, aunque años más tarde llegué a emocionarme mucho con este último. También La madre, de Gorki, otro que me costó muchísimo acabar, pero que en una segunda lectura disfruté como un enano en un bosque de setas.
Lo mismo me pasó con Guerra y paz, aunque años más tarde llegué a emocionarme mucho con este último. También La madre, de Gorki, otro que me costó muchísimo acabar, pero que en una segunda lectura disfruté como un enano en un bosque de setas.
Sus recuerdos, que no eran muchos pero sí hermosos, habían sido sacados de la oscuridad protectora donde vivían y, expuestos a la luz, se velaron y desaparecieron.
Daniel Moyano