26/04/2015 08:22 PM
Buenas compañera Kaoseto, pues ya estamos aquí con Nakrús (por cierto, me ha recordado un poco a Nak muay, que en tailandés quiere decir, Box tahi o Muay thai) Me hizo gracia la pequeña similitud, ya que es un deporte que practico, así que en fin, se me va la pinza de nuevo ya descarrío.
A ver, el capitulo retoma un poco con las enseñanzas de Áynorin, el Jaipú resulta verdaderamente complejo, variado y versátil. Según el concepto de Brandon Sanderson para clasificar los sistemas de magia que aparecen en los libros de fantasía, yo diría que la tuya es una magia dura, vamos que tiene sus principios, normas, clases y eso, lo cual demuestra el gran trabajo que sigues haciendo con la historia. También vamos conociendo cada vez más mejor al grupo de chavales con los que esta Shaedra y comparte sus estudios. También me deja maravillado la conjunción que haces con las razas de tu mundo, y la amplia variedad que manejas: tanto con los seres existentes como los inventadas por ti. Has conseguido darles la vuelta y recrear un mundo nuevo y lleno de color. (Como te comenté, en ese aspecto de mi novela, estoy que me tiro de las patillas). A lo que vamos, Shaedra parece estar comenzando a dudar un poco de no haber seguido a Murrí en su viaje suicida, y la extraña petición de Sain resulta bastante intrigante como para dar en que pensar. La pobre no me imagino la cara que se le debe quedar al ver que sus padres son unos Nakrús-wal. La verdad es que la historia destila misterio y fantasía a raudales, y se prevé una gran esquematización de tu mundo, repito, muy rico en todos sus aspectos.
Felicidades, otro gran capítulo. A ver como se desenvuelve Shaedra en los siguientes. Un saludo y nos leemos.
A ver, el capitulo retoma un poco con las enseñanzas de Áynorin, el Jaipú resulta verdaderamente complejo, variado y versátil. Según el concepto de Brandon Sanderson para clasificar los sistemas de magia que aparecen en los libros de fantasía, yo diría que la tuya es una magia dura, vamos que tiene sus principios, normas, clases y eso, lo cual demuestra el gran trabajo que sigues haciendo con la historia. También vamos conociendo cada vez más mejor al grupo de chavales con los que esta Shaedra y comparte sus estudios. También me deja maravillado la conjunción que haces con las razas de tu mundo, y la amplia variedad que manejas: tanto con los seres existentes como los inventadas por ti. Has conseguido darles la vuelta y recrear un mundo nuevo y lleno de color. (Como te comenté, en ese aspecto de mi novela, estoy que me tiro de las patillas). A lo que vamos, Shaedra parece estar comenzando a dudar un poco de no haber seguido a Murrí en su viaje suicida, y la extraña petición de Sain resulta bastante intrigante como para dar en que pensar. La pobre no me imagino la cara que se le debe quedar al ver que sus padres son unos Nakrús-wal. La verdad es que la historia destila misterio y fantasía a raudales, y se prevé una gran esquematización de tu mundo, repito, muy rico en todos sus aspectos.
Felicidades, otro gran capítulo. A ver como se desenvuelve Shaedra en los siguientes. Un saludo y nos leemos.
Ven, ven, quienquiera que seas;
Seas infiel, idólatra o pagano, ven
ESTE no es un lugar de desesperación
Incluso si has roto tus votos cientos de veces, aún ven!
(Yalal Ad-Din Muhammad Rumi)