Buenas otra vez, Kaoseto,
En este caso es intencionado. Quería adaptar el ritmo de las frases al ritmo de la escena. Y suelo hacerlo a menudo. Es como si intentara que cada frase fuera un golpe. Y evidentemente nada se asemeja más a un golpe seco en una frase que un verbo escueto. En esos momentos de acción desnuda no encontraras ningún o muy pocos intercalados explicativos. Es como una aceleración y en el último estadio intento dejar los menos intersticios posibles.
Otra cosa es que estén bien ordenados y que reflejen la escena con claridad Ya lo revisaré.
En esencia se trata de la reciprocidad entre frase y golpe. Un ejemplo extremo para que se vea claro lo que digo:
De repente el celestial se giró y lanzó un golpe bajo que hirió a su adversario en el muslo y lo desequilibró. Un golpe más y le arrancó la espada de la mano. El siguiente chocó duramente contra la coraza y lo hizo caer por fin al suelo. El cuarto descendió para terminar aquel inoportuno combate. Pero Fërenwir detuvo el filo de su espada en el último momento, rozando la garganta de su enemigo caído. Había reconocido el blasón sobre la coraza...
Me suele gustar este rimo endiablado de escritura en ciertos puntos del combate. Es como una descarga de adrenalina
Tu escena de combate, que por cierto me ha encantado, es del tipo opuesto. Un combate también corto, pero narrativo y ahondando en aspectos varios del personaje, de la situación, del entorno, incluso con toques de humor. Reconozco que la introspección y el humor no ralentizan el ritmo en absoluto. Se desliza con fluidez, pero no es dramático (ya se que tampoco lo pretende en este caso).
No es que yo no use este tipo de escenas, que también lo hago, pero me gustan los cambios de ritmo. Y creo que llega un momento en el clímax del combate, al filo de la muerte, en que los combatientes ya no tienen ni tiempo de pensar, actuan por instinto, con el solo fin de evitar la muerte. Y también pienso que a veces esos aspectos no solo se pueden reflejar con las palabras, si no, aunque suene bastante paradójico, aún más con la ausencia de ellas, yendo más allá de ellas, con las estructuras, con los ritmos, con lo que no se dice. En fin recuerda que tengo naturaleza escultórica y es un poco como hacer formas con las palabras también. aunque parezca bastante raro.
Quote:El tercero me costó más y tuve que leerlo dos veces a partir de «Su compañero desenvainó de inmediato» para representarme la escena. No puedo decirte a ciencia cierta por qué, pero creo que es porque hay demasiado verbo de acción seguido.
En este caso es intencionado. Quería adaptar el ritmo de las frases al ritmo de la escena. Y suelo hacerlo a menudo. Es como si intentara que cada frase fuera un golpe. Y evidentemente nada se asemeja más a un golpe seco en una frase que un verbo escueto. En esos momentos de acción desnuda no encontraras ningún o muy pocos intercalados explicativos. Es como una aceleración y en el último estadio intento dejar los menos intersticios posibles.
Otra cosa es que estén bien ordenados y que reflejen la escena con claridad Ya lo revisaré.
En esencia se trata de la reciprocidad entre frase y golpe. Un ejemplo extremo para que se vea claro lo que digo:
De repente el celestial se giró y lanzó un golpe bajo que hirió a su adversario en el muslo y lo desequilibró. Un golpe más y le arrancó la espada de la mano. El siguiente chocó duramente contra la coraza y lo hizo caer por fin al suelo. El cuarto descendió para terminar aquel inoportuno combate. Pero Fërenwir detuvo el filo de su espada en el último momento, rozando la garganta de su enemigo caído. Había reconocido el blasón sobre la coraza...
Me suele gustar este rimo endiablado de escritura en ciertos puntos del combate. Es como una descarga de adrenalina
Tu escena de combate, que por cierto me ha encantado, es del tipo opuesto. Un combate también corto, pero narrativo y ahondando en aspectos varios del personaje, de la situación, del entorno, incluso con toques de humor. Reconozco que la introspección y el humor no ralentizan el ritmo en absoluto. Se desliza con fluidez, pero no es dramático (ya se que tampoco lo pretende en este caso).
No es que yo no use este tipo de escenas, que también lo hago, pero me gustan los cambios de ritmo. Y creo que llega un momento en el clímax del combate, al filo de la muerte, en que los combatientes ya no tienen ni tiempo de pensar, actuan por instinto, con el solo fin de evitar la muerte. Y también pienso que a veces esos aspectos no solo se pueden reflejar con las palabras, si no, aunque suene bastante paradójico, aún más con la ausencia de ellas, yendo más allá de ellas, con las estructuras, con los ritmos, con lo que no se dice. En fin recuerda que tengo naturaleza escultórica y es un poco como hacer formas con las palabras también. aunque parezca bastante raro.