10/02/2015 10:37 AM
(This post was last modified: 10/02/2015 10:40 AM by Nikto.
Edit Reason: Combinación de ambos mensajes.
)
Buenas, amigo @Nietz!
Es un buen punto lo que señalas, veamos:
Ahora, que cuál es versión es mejor es claramente subjetivo, dado que hay veces que un recurso es mejor que el otro: todo depende del contexto y de lo que quieres contar y/o resaltar. Está bueno tu ejemplo para definirlos. Uno, el primero, es conocido como "discurso directo" donde nos permite meternos directamente en la escena, lo que hace al lector que la "viva" más de cerca. El segundo es el conocido como "discurso indirecto" y es donde el narrador cuenta lo que dice un personaje. Esto nos hace alejarnos un poco y verlo a través de otros ojos, por eso digo ¿hasta que punto realmente nos permite imaginarnos más? Si con la primera yo lo puedo vivir y con la segunda alguien me lo cuenta.
Ahora, una tercera regla es el llamado "Discurso indirecto libre" en el cual la voz del personaje se mezcla con la del narrador, y que esto se sienta natural es donde radica la verdadera maestría de la narración (palabras de Marcelo di Marco).
Veamos un ejemplo de esto último:
Aunque la perspectiva de participar en un conflicto bélico lo sacudió con violencia, procuró mantener la calma para desvanecer el temor que se había apoderado de sus padres y, sobre todo, de Julieta, incapaces de aceptar la idea de tan súbita separación. Será por unos días. Todo se arreglará muy pronto.
¿Notás la diferencia? Por eso, insisto en que los tres son recursos que todos pueden ser mejor o peor, dependiendo el caso.
***
Gracias por el comentario @landanohr, justamente ese link que pasaste es el mismo del post principal que utilicé para comenzar el hilo ^_^. Sin dudas, es una buena fuente para revisar este tema.
Es un buen punto lo que señalas, veamos:
(09/02/2015 07:31 PM)Nietz Wrote: El capitán se asomó al balcón y habló a todos sus hombres:
-Una gran batalla está a punto de comenzar. El enemigo es implacable y no tendrá piedad. Sabemos que los resultados no vienen siendo los mejores para nuestra nación y eso puede desalentar a muchos. -Algunos individuos bajaron sus cabezas al oír eso; el temor había echado raíces en sus corazones después de la última derrota-. Sin embargo, yo les digo que están equivocados si piensan así. Las pérdidas que hemos sufrido hasta ahora deben incentivarnos y llevarnos a buscar la justicia de nuestros compañeros y hermanos caídos. Y cuando la lucha se desate mañana, el recuerdo de mi amigo Gold será el amuleto que me dará la fuerza para aplastar a mis oponentes. ¡Que la venganza nos lleve a la victoria!
Y dicho esto, el ejército entero estalló en un único grito desenfrenado.
Esa misma escena se puede narrar así:
El capitán se asomó al balcón y habló a todos sus hombres. Señaló que la batalla estaba a punto de comenzar y enfatizó una verdad cruda: que el enemigo era implacable, que no tendría piedad. También les recordó que los resultados de los combates anteriores les eran desfavorables, y hubo más de uno que se amedrentó al oír eso. Sin embargo, el propósito del capitán al mencionar eso era otro: envalentonar a sus hombres, darles un motivo para dejar todo en la lucha se avecinaba. Y cuando dijo que la imagen de Gold, el amigo querido por todos, sería el amuleto que le daría las fuerzas para aplastar a sus oponentes, el ejército entero estalló en un grito desenfrenado. El mensaje del capitán había sido recibido: la venganza los llevaría a la victoria.
Considero que la segunda versión es superior a la primera por el simple hecho de que deja más lugar a la imaginación del lector. Las palabras son muy similares, sin embargo, al no ser una sita textual, cada cual puede imaginar la longitud de ese discurso a su manera y poner o quitar los detalles que su imaginación le dicte. Liliana Bodoc, autora de la saga de los Confines, es una genia a la hora de sacarle jugo a este recurso narrativo y no abusar de las líneas de diálogo cuando no son realmente necesarias.
Ahora, que cuál es versión es mejor es claramente subjetivo, dado que hay veces que un recurso es mejor que el otro: todo depende del contexto y de lo que quieres contar y/o resaltar. Está bueno tu ejemplo para definirlos. Uno, el primero, es conocido como "discurso directo" donde nos permite meternos directamente en la escena, lo que hace al lector que la "viva" más de cerca. El segundo es el conocido como "discurso indirecto" y es donde el narrador cuenta lo que dice un personaje. Esto nos hace alejarnos un poco y verlo a través de otros ojos, por eso digo ¿hasta que punto realmente nos permite imaginarnos más? Si con la primera yo lo puedo vivir y con la segunda alguien me lo cuenta.
Ahora, una tercera regla es el llamado "Discurso indirecto libre" en el cual la voz del personaje se mezcla con la del narrador, y que esto se sienta natural es donde radica la verdadera maestría de la narración (palabras de Marcelo di Marco).
Veamos un ejemplo de esto último:
Aunque la perspectiva de participar en un conflicto bélico lo sacudió con violencia, procuró mantener la calma para desvanecer el temor que se había apoderado de sus padres y, sobre todo, de Julieta, incapaces de aceptar la idea de tan súbita separación. Será por unos días. Todo se arreglará muy pronto.
“El pozo”, de Ángel Balzarino
¿Notás la diferencia? Por eso, insisto en que los tres son recursos que todos pueden ser mejor o peor, dependiendo el caso.
(09/02/2015 07:31 PM)Nietz Wrote: Bueno, ahora paso a mi duda =PCon respecto a las dudas, ambas versiones deberían ir con mayúscula. El tema es que tienes que verlo desde otra perspectiva: no es cuestión de que "debe ser empezado con mayúscula". Hay veces que deben ir y otras que no. Esto voy a tratar de poner otros ejemplos en unos días que ejemplifiquen bien ambos casos, pero —como regla general— debes seguir el principio del verbo dicendi (ya que hay veces que se considera el dicendi tácito). En el segundo caso iría con minuscula si en vez de "la mano de juan" pusieras "su mano", ya que ahí si estaría el dicendi tácito. A lo que me refiero con dicendi tácito es que se infiere que antes de "su mano" iría un "dijo, su mano...". Espero haber sido de ayuda, jeje.
¿Cómo hago cuando una interdicción entre guiones aparece en la mitad de una oración y, por lo tanto, no puedo empezarla con mayúsculas como correspondería?
Porque una cosa es decir.
-¿Quieres tranquilizarte, Juan? -Pablo encendió un cigarrillo y caminó hasta la ventana-. Ellos ya deben estar por llegar.
¿Pero qué pasa en este otro caso? :
-Lo que tú no quieres entender -la mano de Juan apretaba con impotencia la nota de rescate- es que estamos hablando de mi hermana y su hijo.
¿Está bien usado el guionado en ese último caso? Sé que ese ejemplo puntual podría construirse de otra manera para evitar la oración sin punto ni mayúscula, pero hay veces que este recurso es ineludible y no creo que sea necesario eludirlo. ¿Se puede usar así?
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Gracias por el comentario @landanohr, justamente ese link que pasaste es el mismo del post principal que utilicé para comenzar el hilo ^_^. Sin dudas, es una buena fuente para revisar este tema.
"El que desea sacar la espada es un principiante. El que puede sacar la espada es un experto. El que es la espada misma es un maestro." —Risuke Otake.