Ok, ya empezamos mal.
El primer párrafo no se entiende. ¿Despedazar a quién?
Hola Elvilla. Me alegro que decidieras compartir tu trabajo con el foro. Yo también me uní hace poquito y me entusiasma mucho compartir con los compas las opiniones y crecer juntos.
Enhorabuena por lo de la trilogía de ciencia ficción. Que gran logro.
Dicho esto, paso a mis observaciones.
Veo una gran oportunidad de mejoría, porque como escritor veo que eres fornido. Me refiero a que trabajas duro. Eso se nota en que hayas completado una trilogía y también se nota en la página. Pero lo que te falta son algunos fundamentos básicos.
Estoy seguro que no te costará mucho asimilarlos. Y entonces tu escritura se elevará a nuevas alturas.
Tu ego te dirá que no tengo razón, pero te invito a que hagas la prueba y veas cómo reaccionan los lectores. Te aseguro que lograrás llegar a muchos más.
Si fuera a poner una analogía, diría que eres un boxeador muy fuerte pero poco sutil. Yo, que soy muy débil y no he escrito ni la mitad de lo que tú has logrado, me he preocupado en aprender cómo ser lo más efectivo posible. De ahí que sienta mi obligación aportarte estos conceptos que opino es lo que te falta para noquear a los lectores con tu narrativa. Yo sé que has noqueado a muchos, pero otros tantos han huído, asustados por tu imponente fuerza. Lo que yo te propongo es acercarte a ellos con más suavidad y atraerlos para luego descargar esos poderosos golpes narrativos.
Pero basta de boxeo y pasemos a la escritura.
El estilo en este texto es demasiado pomposo, en detrimento de la claridad. Que los árboles sean azules en ese lugar, no es relevante e interfiere con la comprensión de la acción. El lector se confunde porque es demasiada información para asimilar.
Este es el primer principio fundamental que quiero compartir contigo:
"A los lectores no les interesa nuestro mundo. Los lectores solo conectan con personajes".
Esto quiere decir que todas las expresivas descripciones que incluyes acerca de todos esos detalles que hacen a tu mundo único y especial, son solo ruido que interfiere a la narración.
Yo le llamo a esto:
"La triste verdad"
¿Verdad que es triste? Pero eso se debe a cómo experimentamos las cosas como seres humanos. Esto me lleva al segundo principio fundamental que quiero compartir contigo y es la forma en la que el lector procesa la información en la página:
"La atención del lector está donde la atención del personaje"
Osea, el lector asume que lo que se le muestra es lo que está viendo el personaje. ¿Por qué es así? Simplemente porque todos habitamos un cuerpo físico y todo lo experimentamos a través de nuestros ojos, oídos, piel, etc. De modo que el lector necesita saber en todo momento qué cuerpo está habitando en la historia.
Si comienzas diciendo "La bestia corría y corría" yo asumo que estoy mirando a la bestia correr. Por eso es desconcertante cuando en el tercer párrafo, resulta que Eco no está corriendo con la bestia sino que ni sabe de ella.
Mi reacción es la siguiente: Esto es confuso, no me estoy divirtiendo. No voy a seguir leyendo.
¿De qué forma se puede evitar esto?
Ya que estás usando un narrador omniciente, yo lo pondría de esta manera:
"Absorto en sus escritos, Eco estaba completamente ajeno a la terrible bestia que corría hacia él en ese momento. Revisaba las anotaciones de su ajado cuaderno de viaje, mientras las ocho gruesas patas de la enorme criatura avanzaban a través del bosque, reduciendo a astillas las pobres ramas contra las que chocaba".
Otra forma sería tal vez:
"La bestia corría a través del bosque, encolerizada y con sed de sangre, destrozando con su enorme cuerpo las ramas que se cruzaban en su camino, bla bla bla (y no mucho más). Eco, en tal otro lado, permanecía ajeno al peligro que se cernía sobre él".
Eco debe aparecer en el primer párrafo sí o sí. Porque como lectores necesitamos el punto de vista de Eco todo el tiempo, para orientarnos en la narración.
Entonces, puedes hablar de las fauces de la bestia, pero dando el punto de vista de Eco en contraposición. Cuando Eco le da el mordisco a la hueva, ahí puedes hablar de la otra boca de dientes así y asá que estaba cada vez más cerca, y del olor nauseabundo en oposición al rico sabor que sintió Eco. Porque de esta forma son dos realidades que están a punto de chocar.
Solemos darle demasiada importancia a la sorpresa, pensando que el lector estará impactado. Pero lo cierto es que no brindar la información básica de lo que está ocurriendo, solo confunde al lector y no le permite conectar con la experiencia.
Eco está comiendo los huevos que acaba de robar y la mamá bestia está rastreándolo para hacerlo pelota. Ok. Eso está bien. Nos dice que Eco es despreocupado y no le teme al peligro. Pero no sabemos nada más. Detallas mucho las manchas de la bestia, pero no dices nada acerca del contenido del libro. ¿Sabes lo que eso dice? Poco conocimiento de la historia.
Una cosa es cuando escribes el primer capítulo por primera vez, que no sabes a dónde va la cosa, pero una vez que avanzas un poco, debes volver y poner migajas para el lector.
Necesitamos sentir que Eco está en una misión de la que a nosotros nos gustaría ser parte. Las insinuasiones generales no son suficientes. Hay que ser concreto. Porque el lector precisa empezar a meterse en la piel de Eco. En sus preocupaciones, en sus miedos, en sus deseos.
Todo eso que dice el narrador acerca del mundo, puedes ponerlo en los pensamientos de Eco. Si Eco revisa su diario de viaje, puede hablar del mundo desde su punto de vista y eso al lector le parecerá fascinante. Pero solo si es desde la piel de Eco. Desde su objetivo. No es lo mismo decir: El mundo era redondo, pero nadia lo sabía. A que Colón revise su diario de viaje y diga: Hemos viajado ya por tres meses y aún no hemos llegado a las Idias. Los hombres están muy impacientes. Comienzan a decir que cualquier noche nos caeremos del mundo. Pobres diablos. No los culpo. Mis cálculos estaban errados. Sé que el mundo no es plano como todos creen, pero evidentemente se trata de una esfera mucho más grande de lo que anticipaba. Los hombres hablan de regresar pero lo que no saben es pasamos el punto de no retorno hace ya dos semana. Si no llegamos a las Indias a tiempo, todos moriremos.
Todo debe pasar por la carne del protagonista. Todo. Aunque no esté en primera persona.
Espero que te sirvan mis comentarios. Sé que es mucho para asimilar, pero confío en ti.
Saludos
El primer párrafo no se entiende. ¿Despedazar a quién?
Hola Elvilla. Me alegro que decidieras compartir tu trabajo con el foro. Yo también me uní hace poquito y me entusiasma mucho compartir con los compas las opiniones y crecer juntos.
Enhorabuena por lo de la trilogía de ciencia ficción. Que gran logro.
Dicho esto, paso a mis observaciones.
Veo una gran oportunidad de mejoría, porque como escritor veo que eres fornido. Me refiero a que trabajas duro. Eso se nota en que hayas completado una trilogía y también se nota en la página. Pero lo que te falta son algunos fundamentos básicos.
Estoy seguro que no te costará mucho asimilarlos. Y entonces tu escritura se elevará a nuevas alturas.
Tu ego te dirá que no tengo razón, pero te invito a que hagas la prueba y veas cómo reaccionan los lectores. Te aseguro que lograrás llegar a muchos más.
Si fuera a poner una analogía, diría que eres un boxeador muy fuerte pero poco sutil. Yo, que soy muy débil y no he escrito ni la mitad de lo que tú has logrado, me he preocupado en aprender cómo ser lo más efectivo posible. De ahí que sienta mi obligación aportarte estos conceptos que opino es lo que te falta para noquear a los lectores con tu narrativa. Yo sé que has noqueado a muchos, pero otros tantos han huído, asustados por tu imponente fuerza. Lo que yo te propongo es acercarte a ellos con más suavidad y atraerlos para luego descargar esos poderosos golpes narrativos.
Pero basta de boxeo y pasemos a la escritura.
El estilo en este texto es demasiado pomposo, en detrimento de la claridad. Que los árboles sean azules en ese lugar, no es relevante e interfiere con la comprensión de la acción. El lector se confunde porque es demasiada información para asimilar.
Este es el primer principio fundamental que quiero compartir contigo:
"A los lectores no les interesa nuestro mundo. Los lectores solo conectan con personajes".
Esto quiere decir que todas las expresivas descripciones que incluyes acerca de todos esos detalles que hacen a tu mundo único y especial, son solo ruido que interfiere a la narración.
Yo le llamo a esto:
"La triste verdad"
¿Verdad que es triste? Pero eso se debe a cómo experimentamos las cosas como seres humanos. Esto me lleva al segundo principio fundamental que quiero compartir contigo y es la forma en la que el lector procesa la información en la página:
"La atención del lector está donde la atención del personaje"
Osea, el lector asume que lo que se le muestra es lo que está viendo el personaje. ¿Por qué es así? Simplemente porque todos habitamos un cuerpo físico y todo lo experimentamos a través de nuestros ojos, oídos, piel, etc. De modo que el lector necesita saber en todo momento qué cuerpo está habitando en la historia.
Si comienzas diciendo "La bestia corría y corría" yo asumo que estoy mirando a la bestia correr. Por eso es desconcertante cuando en el tercer párrafo, resulta que Eco no está corriendo con la bestia sino que ni sabe de ella.
Mi reacción es la siguiente: Esto es confuso, no me estoy divirtiendo. No voy a seguir leyendo.
¿De qué forma se puede evitar esto?
Ya que estás usando un narrador omniciente, yo lo pondría de esta manera:
"Absorto en sus escritos, Eco estaba completamente ajeno a la terrible bestia que corría hacia él en ese momento. Revisaba las anotaciones de su ajado cuaderno de viaje, mientras las ocho gruesas patas de la enorme criatura avanzaban a través del bosque, reduciendo a astillas las pobres ramas contra las que chocaba".
Otra forma sería tal vez:
"La bestia corría a través del bosque, encolerizada y con sed de sangre, destrozando con su enorme cuerpo las ramas que se cruzaban en su camino, bla bla bla (y no mucho más). Eco, en tal otro lado, permanecía ajeno al peligro que se cernía sobre él".
Eco debe aparecer en el primer párrafo sí o sí. Porque como lectores necesitamos el punto de vista de Eco todo el tiempo, para orientarnos en la narración.
Entonces, puedes hablar de las fauces de la bestia, pero dando el punto de vista de Eco en contraposición. Cuando Eco le da el mordisco a la hueva, ahí puedes hablar de la otra boca de dientes así y asá que estaba cada vez más cerca, y del olor nauseabundo en oposición al rico sabor que sintió Eco. Porque de esta forma son dos realidades que están a punto de chocar.
Solemos darle demasiada importancia a la sorpresa, pensando que el lector estará impactado. Pero lo cierto es que no brindar la información básica de lo que está ocurriendo, solo confunde al lector y no le permite conectar con la experiencia.
Eco está comiendo los huevos que acaba de robar y la mamá bestia está rastreándolo para hacerlo pelota. Ok. Eso está bien. Nos dice que Eco es despreocupado y no le teme al peligro. Pero no sabemos nada más. Detallas mucho las manchas de la bestia, pero no dices nada acerca del contenido del libro. ¿Sabes lo que eso dice? Poco conocimiento de la historia.
Una cosa es cuando escribes el primer capítulo por primera vez, que no sabes a dónde va la cosa, pero una vez que avanzas un poco, debes volver y poner migajas para el lector.
Necesitamos sentir que Eco está en una misión de la que a nosotros nos gustaría ser parte. Las insinuasiones generales no son suficientes. Hay que ser concreto. Porque el lector precisa empezar a meterse en la piel de Eco. En sus preocupaciones, en sus miedos, en sus deseos.
Todo eso que dice el narrador acerca del mundo, puedes ponerlo en los pensamientos de Eco. Si Eco revisa su diario de viaje, puede hablar del mundo desde su punto de vista y eso al lector le parecerá fascinante. Pero solo si es desde la piel de Eco. Desde su objetivo. No es lo mismo decir: El mundo era redondo, pero nadia lo sabía. A que Colón revise su diario de viaje y diga: Hemos viajado ya por tres meses y aún no hemos llegado a las Idias. Los hombres están muy impacientes. Comienzan a decir que cualquier noche nos caeremos del mundo. Pobres diablos. No los culpo. Mis cálculos estaban errados. Sé que el mundo no es plano como todos creen, pero evidentemente se trata de una esfera mucho más grande de lo que anticipaba. Los hombres hablan de regresar pero lo que no saben es pasamos el punto de no retorno hace ya dos semana. Si no llegamos a las Indias a tiempo, todos moriremos.
Todo debe pasar por la carne del protagonista. Todo. Aunque no esté en primera persona.
Espero que te sirvan mis comentarios. Sé que es mucho para asimilar, pero confío en ti.
Saludos