19/01/2016 09:03 PM
Soy un tonto consumista, acumulador, obsesivo compulsivo, con pretensiones de coleccionista, lo que no encaja nada bien con mi cada vez más acuciante pobreza, y necesito tener mis bibliotecas llenas y llenas de libros. Estoy enfermo, lo sé, y soy consciente de que he erotizado el acto de la lectura al punto tal de hacer un autentico culto dionisíaco del color y la forma de las hojas, su aroma, el tipo de fuente de las letras, el peso combinado de una tapa y su contratapa y el sonido que hacen las páginas al deslizarse bajo las yemas de mis dedos. Así que sí, pensad lo que queráis de mi, pero en mi humilde opinión no hay comparación posible. Tuve una vez, hace algunos años, un kindle que me había regalado una ex novia, pero apenas dejamos de arrugar sábanas juntos le heredé aquel curioso aparatito a mi padre, sin haberlo usado casi. He leído, también, algún que otro libro descatalogado en el ordenador, sobre todo en horario de oficina, y más recientemente hasta en el móvil, porque soy un vicioso que no puede parar de leer, pero me quedo con los libros de papel toda la vida. Así que, en respuesta a tu pregunta: papel, una y mil veces papel.