06/03/2017 10:38 AM
Buenas, Kaoseto.
Aprovecho un momento en la oficina para responder, porque me he quedado sin portátil. Así que vais a estar tranquilitos unos días. Aprovechad para sumergiros en el lado "pink" de la vida, a salvo de mi sombría y desgarrada visión del mundo
En serio, me están ayudando mucho tus comentarios y los otros que me llegan desde este foro y los agradezco un montón. No es inesperado que los lectores se sientan desesperados ante la acumulación de amargura y pesadumbre que les estoy echando encima. Anteriormente ya me lo habían comentado algunos, pero más o menos en el capítulo 6 (deberían estar ya al borde del suicidio). En ese punto abrí un poco la historia. No es que sea más happy (ni mucho menos, lo siento ), pero creo que lo que agobia más al principio, incluso más que lo sombrío del relato, es el ambiente claustrofóbico que lo impregna. Por eso quizá se acentúa más la sensación de estar dando vueltas como en una noria. Hum...
No estoy muy segura de hasta que punto quiero cambiarlo, aunque supongo que debería hacer concesiones si quiero que un lector medio resista la maratón de un libro bastante largo que empieza en un registro tan difícil. Quizá cortar algunas partes, como sugieres sería una buena opción.
Eso lo tengo en la cabeza, pero no lo he trasladado al relato. Se supone que el rey a mandado llamar a un curandero de fuera (en su intento de mantener lo máximo posible el secreto de que este prisionero es un celestial. Más tarde ya se entenderá por qué eso es tan importante. De hecho creo que al final de este capítulo, por cierto). Así que el curandero abandona la fortaleza y tiene que pasar por el patio de armas para llegar al portón exterior. Prácticamente él y Férenwir han salido de la habitación casi al mismo tiempo y van al mismo sitio, así que no es tan raro que coincidan en la salida.
Me suele pasar que todo lo que no me excedo en las descripciones de ambientes y personajes se me pasa de meticuloso en ciertos momentos de acción, como por ejemplo en el fragmento del juego del postre, sobre la mesa y quizá también aquí. Seguramente lo aligere.
Bueno, no tan spoiler ya que en principio solo voy a colgar hasta el capítulo 3. No porque no me interese recibir más comentarios, pero es que no quiero abusar ni deprimir a nadie. Los capítulos son largos y ya verás que el tono no mejora de forma inmediata, incluso justo antes del final de este capítulo.
Os dejo que tengo que volver al curro.
Nos leemos.
Aprovecho un momento en la oficina para responder, porque me he quedado sin portátil. Así que vais a estar tranquilitos unos días. Aprovechad para sumergiros en el lado "pink" de la vida, a salvo de mi sombría y desgarrada visión del mundo
En serio, me están ayudando mucho tus comentarios y los otros que me llegan desde este foro y los agradezco un montón. No es inesperado que los lectores se sientan desesperados ante la acumulación de amargura y pesadumbre que les estoy echando encima. Anteriormente ya me lo habían comentado algunos, pero más o menos en el capítulo 6 (deberían estar ya al borde del suicidio). En ese punto abrí un poco la historia. No es que sea más happy (ni mucho menos, lo siento ), pero creo que lo que agobia más al principio, incluso más que lo sombrío del relato, es el ambiente claustrofóbico que lo impregna. Por eso quizá se acentúa más la sensación de estar dando vueltas como en una noria. Hum...
No estoy muy segura de hasta que punto quiero cambiarlo, aunque supongo que debería hacer concesiones si quiero que un lector medio resista la maratón de un libro bastante largo que empieza en un registro tan difícil. Quizá cortar algunas partes, como sugieres sería una buena opción.
Quote:- Tal y como está contado, al leerlo me pareció mucha coincidencia que, con todo el gentío que hay por la ciudad, Férenwir se vuelva a encontrar con el curandero. No sé, tal vez el curandero lo había seguido o algo, pero no se dice.
Eso lo tengo en la cabeza, pero no lo he trasladado al relato. Se supone que el rey a mandado llamar a un curandero de fuera (en su intento de mantener lo máximo posible el secreto de que este prisionero es un celestial. Más tarde ya se entenderá por qué eso es tan importante. De hecho creo que al final de este capítulo, por cierto). Así que el curandero abandona la fortaleza y tiene que pasar por el patio de armas para llegar al portón exterior. Prácticamente él y Férenwir han salido de la habitación casi al mismo tiempo y van al mismo sitio, así que no es tan raro que coincidan en la salida.
Quote:- la parte en que huye del cuarto, explicando cómo sale a la habitación superior, pasa un poco como te dije en el fragmento sobre la pelea que te comenté en otro hilo, mucho verbo de acción seguido, aunque así y todo me lo leí sin perderme. Quién sabe, a lo mejor cortando el párrafo en varios en los buenos sitios se aligeraría la cosa.
Me suele pasar que todo lo que no me excedo en las descripciones de ambientes y personajes se me pasa de meticuloso en ciertos momentos de acción, como por ejemplo en el fragmento del juego del postre, sobre la mesa y quizá también aquí. Seguramente lo aligere.
Quote:Cita:
Es un novela coral. Dividida en 3 partes. La primera, dedicada a los cautivos, tiene 6 capítulos. En el tercero volvemos a Férenwir. En el cuarto conocemos a Kerrar, el hermano de Arjesen. El quinto y el sexto están dedicados a Arjesen (el sexto compartido con Briseyd). Es divertido hacer que los caminos de los personajes se entrecrucen.
Eso es spoiler a tope!! xD Supongo que ahora vendrá la huida de Férenwir. Tengo curiosidad por ver a Kerrar, que ese también debe de acordarse de la caída de los celestiales.
Bueno, no tan spoiler ya que en principio solo voy a colgar hasta el capítulo 3. No porque no me interese recibir más comentarios, pero es que no quiero abusar ni deprimir a nadie. Los capítulos son largos y ya verás que el tono no mejora de forma inmediata, incluso justo antes del final de este capítulo.
Os dejo que tengo que volver al curro.
Nos leemos.