26/01/2017 11:54 AM
Buenas, ly23, y bienvenido por fantasitura!
Me parece interesante escribir sobre una posible tierra radioactiva y lo original es que tu historia no empieza en USA sino en Madrid, y además con una familia vasca, jeje. ¡Sólo faltaba que fuera de Bilbao!
Se nota la imaginación y que te has currado el modo de vida de Iker y su familia y me he leído el capítulo de un tirón. Sólo diría dos cosas que me han chocado:
- los dos primeros párrafos quedan un poco confusos con respecto al resto, la llegada de la información empieza un poco in medias res sin explicar de quiénes se está hablando.
- A veces da la impresión que Iker se ha teletransportado de nuestra época a la suya de lo bien que conoce cómo eran antaño las cosas y cómo las presenta como «normal» en comparación a su vida, cuando lógicamente a él lo que le parece normal es tener una vaca mutada y polluelos bicéfalos ^^
Por lo demás, el estilo es ligero y da ganas de saber qué va a pasar con esas flores brillantes.
Lo malo con esas cosas es que, como se parte de algo que teóricamente podría ocurrir, luego es necesario documentarse bastante y es fácil meter la pata. Por eso yo suelo preferir la fantasía completa ^^
Me ha llamado la atención esa división de grupos entre los «mutantes» y los humanos, diciendo que son dos especies distintas: doy por hecho entonces que no se pueden reproducir entre ellas. Supongo que esa especie de mutantes se formaría desde el principio de la exposición a la radiación pero, a menos que los humanos hayan mutado para ser más resistentes a la radiación, adivino que un buen porcentaje de sus hijos seguirá naciendo con malformaciones en la era de Iker, ¿esos pertenecen a la especie de los «mutantes» también? Para dar un dato, en 2014, justo después de la guerra, parece ser que el 23% de los recién nacidos en Libia nacieron con malformaciones a causa de las bombas de uranio empobrecido. Si estalla una guerra nuclear mundial y estallan centrales y bombas por todos los lados, con cuatrocientos reactores soltando año tras año la misma radioactividad que Fukushima, no sé si ningún animal grandote como el humano iba a salir vivo de esa. Pero bueno, esto es ciencia ficción y, aparte de que tendríamos un montón de zonas de la tierra condenadas para millones de años, no se puede adivinar tampoco qué es lo que pasaría en la vida real… ¡esperemos que no lo avergüemos nunca!
Yo me vuelvo a un mundo menos apocalíptico No dudes en postear más por aquí!
Saludos,
Me parece interesante escribir sobre una posible tierra radioactiva y lo original es que tu historia no empieza en USA sino en Madrid, y además con una familia vasca, jeje. ¡Sólo faltaba que fuera de Bilbao!
Se nota la imaginación y que te has currado el modo de vida de Iker y su familia y me he leído el capítulo de un tirón. Sólo diría dos cosas que me han chocado:
- los dos primeros párrafos quedan un poco confusos con respecto al resto, la llegada de la información empieza un poco in medias res sin explicar de quiénes se está hablando.
- A veces da la impresión que Iker se ha teletransportado de nuestra época a la suya de lo bien que conoce cómo eran antaño las cosas y cómo las presenta como «normal» en comparación a su vida, cuando lógicamente a él lo que le parece normal es tener una vaca mutada y polluelos bicéfalos ^^
Por lo demás, el estilo es ligero y da ganas de saber qué va a pasar con esas flores brillantes.
Lo malo con esas cosas es que, como se parte de algo que teóricamente podría ocurrir, luego es necesario documentarse bastante y es fácil meter la pata. Por eso yo suelo preferir la fantasía completa ^^
Me ha llamado la atención esa división de grupos entre los «mutantes» y los humanos, diciendo que son dos especies distintas: doy por hecho entonces que no se pueden reproducir entre ellas. Supongo que esa especie de mutantes se formaría desde el principio de la exposición a la radiación pero, a menos que los humanos hayan mutado para ser más resistentes a la radiación, adivino que un buen porcentaje de sus hijos seguirá naciendo con malformaciones en la era de Iker, ¿esos pertenecen a la especie de los «mutantes» también? Para dar un dato, en 2014, justo después de la guerra, parece ser que el 23% de los recién nacidos en Libia nacieron con malformaciones a causa de las bombas de uranio empobrecido. Si estalla una guerra nuclear mundial y estallan centrales y bombas por todos los lados, con cuatrocientos reactores soltando año tras año la misma radioactividad que Fukushima, no sé si ningún animal grandote como el humano iba a salir vivo de esa. Pero bueno, esto es ciencia ficción y, aparte de que tendríamos un montón de zonas de la tierra condenadas para millones de años, no se puede adivinar tampoco qué es lo que pasaría en la vida real… ¡esperemos que no lo avergüemos nunca!
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Saludos,
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