10/04/2016 03:24 PM
Dios, odio a mis vecinos cuando dejan a su perro (casi la mayoría del tiempo) encerrado en el balcón, y que no para de llorar... No dejo de tener pesadillas con el pobre perro. Ojalá un día se les escape y no vuelvan a verlo nunca.
No estés triste, ¡a alguien le importas! A mí no, ¡pero a alguien más sí!