Creo que te debo una visita…
A ver, los relatos cortos no son lo mío, pero espero que algo de lo que te comente aquí pueda resultarte de utilidad. Voy a intentar ser tan meticulosa como me sea posible, en atención a todo el tiempo que has dedicado a mis capítulos. Y aunque sea un comentario repetido ya antes hasta la saciedad, que quede claro que son solo mis impresiones personales. Ni soy crítico literario ni lo pretendo.
En general remarcaría como puntos positivos que son fáciles de leer y no me refiero tan solo a su evidente brevedad. El estilo es ágil, el desarrollo completamente adecuado a su longitud, fluido, sin saltos extemporáneos, ni giros forzados que chirríen. Los temas bien escogidos para el medio de narración y su longitud. No te quedas a medias, consigues llegar a donde quieres sin tener que extenderte en hojas y hojas. Supongo que ese el que arte del relato corto. Y digo supongo porque yo suelo carecer del don de la síntesis. Así que nunca he probado a escribir uno. Además la forma de presentar y desarrollar la idea consigue generar interés. Diría que en casi todos ellos se palpa el crescendo hasta llegar al quiebro final, ese giro inesperado que cierra cada relato para sacudir al lector.
Otro aspecto que me atrae es que pareces moverte en un realismo mágico, esa frontera indefinida que no siempre es fácil encontrar y sobre la que no siempre es fácil mantenerse en equilibrio.
Entre los puntos negativos está el hecho de que se repite el mismo patrón en todos ellos. Se presenta la idea, se lleva en una dirección muy concreta y en el último instante giro inesperado. No se me ha hecho pesado, aunque los he leído todos seguidos, pero si leyera un libro tuyo de relatos cortos sería monótono que todos respondieran a la misma estructura.
Aunque es el más agradecido, un relato corto no está encadenado por defecto a ese tipo de desarrollo.
El estilo, aunque es ágil, como te he comentado antes podría estar más pulido. No sé si son versiones definitivas, ya me lo dirás tú, pero en algunos momentos dan la impresión de que no estar corregidos. Luego te pongo algún ejemplo.
Y otra cosa que he notado es que es que, para mi gusto personal, los relatos se quedan en la superficie de lo que cuentan. Incluso aunque muestras escenas de gran crudeza, que están muy bien concebidas, no he conseguido conectar, sufrir o enfadarme, compartir lo que les sucede a los protagonistas. Es como si lo contemplara desde la distancia. No creo que eso tenga que ver con que sea un relato corto.
De todos los relatos que el leído, el que más me ha gustado y el que me ha parecido más conseguido ha sido "La pelota". Quizá porque es el que más se acerca al realismo mágico que me gusta.
Pero empiezo por "Los ojos azules" y por el estilo.
En un relato corto es estilo debería ser perfecto. En un libro de 800 hojas es difícil mantener el mismo nivel de excelencia narrativo en cada página, pero en un relato de menos de 2 hojas no se tiene excusa. Cada uno escribe a su manera, pero te pongo algún ejemplo de por qué me ha parecido (a mí personalmente) que el estilo no está cuidado.
Lo primero que me he encontrado y que me ha sorprendido bastante es que en el primer párrafo utilizas el adjetivo azul cuatro veces. Y luego tampoco es que pares. No lo entiendo. Es imposible que no te hayas dado cuenta de que en un relato de apenas 2 páginas usas azul o azules referido a los ojos de la chica (sí me he parado a contarlas porque me ha resultado hasta chocante) 11 veces y eso me ha hecho pensar que quizá sea algo deliberado.
Si lo que querías era evidenciar que el protagonista tiene una fijación enfermiza por los ojos azules, seguro que hay otras formas más elegantes de hacerlo.
" Era la segunda vez que veía a esa chica esa noche, y no fue hasta entonces que ella…" Siendo quisquillosa me canta un poco la repetición tan seguida del pronombre esa, aunque podría ser una elección personal de estilo que yo no entiendo. Y delante de la conjunción "y" la coma sobra que yo sepa. Y lo haces a menudo. También delante de "o".
"Una chica distinta; un estilo entre anarquista y gótica," creo que estás hablando del estilo, no de la chica, así que debería ser "gótico" ¿no?
"iba con un estilo anarquista más típico (y en mi opinión aburrido), que el de esa chica que me estaba dejando loco ". No es que sea incorrecto pero esa construcción final de la frase "que el de esa chica que" no suma glamour al texto precisamente. Yo lo cambiaría: iba con un estilo anarquista más tìpico comparado/en contrate con el de esa chica bla, bla.
Son solo sugerencias por si te ayudan.
"Me empecé a acercar" Empecé acercarme
"Ella me empezó a acariciar la mano" Ella empezó a acariciarme la mano. Aunque incluso "Ella empezó a acariciar mi mano" me suena mejor.
Repites vocabulario "intentando reencontrarla" "volver a encontrarla" "volver a encontrar"
Algunos son detalles insignificantes, pero es que hay bastantes y por acumulación rebajan la calidad del texto.
Bueno, de momento hasta aquí he llegado. Pero si quieres puedo seguir.
Nos leemos.
A ver, los relatos cortos no son lo mío, pero espero que algo de lo que te comente aquí pueda resultarte de utilidad. Voy a intentar ser tan meticulosa como me sea posible, en atención a todo el tiempo que has dedicado a mis capítulos. Y aunque sea un comentario repetido ya antes hasta la saciedad, que quede claro que son solo mis impresiones personales. Ni soy crítico literario ni lo pretendo.
En general remarcaría como puntos positivos que son fáciles de leer y no me refiero tan solo a su evidente brevedad. El estilo es ágil, el desarrollo completamente adecuado a su longitud, fluido, sin saltos extemporáneos, ni giros forzados que chirríen. Los temas bien escogidos para el medio de narración y su longitud. No te quedas a medias, consigues llegar a donde quieres sin tener que extenderte en hojas y hojas. Supongo que ese el que arte del relato corto. Y digo supongo porque yo suelo carecer del don de la síntesis. Así que nunca he probado a escribir uno. Además la forma de presentar y desarrollar la idea consigue generar interés. Diría que en casi todos ellos se palpa el crescendo hasta llegar al quiebro final, ese giro inesperado que cierra cada relato para sacudir al lector.
Otro aspecto que me atrae es que pareces moverte en un realismo mágico, esa frontera indefinida que no siempre es fácil encontrar y sobre la que no siempre es fácil mantenerse en equilibrio.
Entre los puntos negativos está el hecho de que se repite el mismo patrón en todos ellos. Se presenta la idea, se lleva en una dirección muy concreta y en el último instante giro inesperado. No se me ha hecho pesado, aunque los he leído todos seguidos, pero si leyera un libro tuyo de relatos cortos sería monótono que todos respondieran a la misma estructura.
Aunque es el más agradecido, un relato corto no está encadenado por defecto a ese tipo de desarrollo.
El estilo, aunque es ágil, como te he comentado antes podría estar más pulido. No sé si son versiones definitivas, ya me lo dirás tú, pero en algunos momentos dan la impresión de que no estar corregidos. Luego te pongo algún ejemplo.
Y otra cosa que he notado es que es que, para mi gusto personal, los relatos se quedan en la superficie de lo que cuentan. Incluso aunque muestras escenas de gran crudeza, que están muy bien concebidas, no he conseguido conectar, sufrir o enfadarme, compartir lo que les sucede a los protagonistas. Es como si lo contemplara desde la distancia. No creo que eso tenga que ver con que sea un relato corto.
De todos los relatos que el leído, el que más me ha gustado y el que me ha parecido más conseguido ha sido "La pelota". Quizá porque es el que más se acerca al realismo mágico que me gusta.
Pero empiezo por "Los ojos azules" y por el estilo.
En un relato corto es estilo debería ser perfecto. En un libro de 800 hojas es difícil mantener el mismo nivel de excelencia narrativo en cada página, pero en un relato de menos de 2 hojas no se tiene excusa. Cada uno escribe a su manera, pero te pongo algún ejemplo de por qué me ha parecido (a mí personalmente) que el estilo no está cuidado.
Lo primero que me he encontrado y que me ha sorprendido bastante es que en el primer párrafo utilizas el adjetivo azul cuatro veces. Y luego tampoco es que pares. No lo entiendo. Es imposible que no te hayas dado cuenta de que en un relato de apenas 2 páginas usas azul o azules referido a los ojos de la chica (sí me he parado a contarlas porque me ha resultado hasta chocante) 11 veces y eso me ha hecho pensar que quizá sea algo deliberado.
Si lo que querías era evidenciar que el protagonista tiene una fijación enfermiza por los ojos azules, seguro que hay otras formas más elegantes de hacerlo.
" Era la segunda vez que veía a esa chica esa noche, y no fue hasta entonces que ella…" Siendo quisquillosa me canta un poco la repetición tan seguida del pronombre esa, aunque podría ser una elección personal de estilo que yo no entiendo. Y delante de la conjunción "y" la coma sobra que yo sepa. Y lo haces a menudo. También delante de "o".
"Una chica distinta; un estilo entre anarquista y gótica," creo que estás hablando del estilo, no de la chica, así que debería ser "gótico" ¿no?
"iba con un estilo anarquista más típico (y en mi opinión aburrido), que el de esa chica que me estaba dejando loco ". No es que sea incorrecto pero esa construcción final de la frase "que el de esa chica que" no suma glamour al texto precisamente. Yo lo cambiaría: iba con un estilo anarquista más tìpico comparado/en contrate con el de esa chica bla, bla.
Son solo sugerencias por si te ayudan.
"Me empecé a acercar" Empecé acercarme
"Ella me empezó a acariciar la mano" Ella empezó a acariciarme la mano. Aunque incluso "Ella empezó a acariciar mi mano" me suena mejor.
Repites vocabulario "intentando reencontrarla" "volver a encontrarla" "volver a encontrar"
Algunos son detalles insignificantes, pero es que hay bastantes y por acumulación rebajan la calidad del texto.
Bueno, de momento hasta aquí he llegado. Pero si quieres puedo seguir.
Nos leemos.