10/10/2019 09:58 PM
(This post was last modified: 10/10/2019 10:14 PM by Guardián Ciego.)
Es un tierno poema, con tiempos bien llevados y rimas esforzadas, con obvia espontaneidad y entrega del sujeto lírico, lindo (y pasional). El único pero que tienes, mi estimado Bicerofonte, es el ritmo. Llevo media hora analizando el primer verso, su cadencia frena en seco para la onceava sílaba (en “fría”) y de ahí no se vuelve recuperar la estrofa hasta el cuarto verso. He notado que te gusta aportar al estilo de los demás, así que tengo la esperanza de que no te lo tomes a mal.
En un primer momento pensé que el verso era demasiado largo, pero es un pentadecasílabo en toda regla, dividido naturalmente en hemistiquios de 7 y 8 sílabas. Luego pensé que el problema eran los mismos hemistiquios, pero el primero es un heptasílabo melódico pleno (jerga aburrida) y el segundo un octosílabo heroico puro (más jerga aburrida). Al final el problema era que los versos melódicos y heroicos no armonizan del todo bien: Mira cómo cambia si desplazamos un lugar las dos primeras sílabas tónicas:
Era una brumosa - velada fría de invierno.
Y aquella tan brumosa - velada fría de invierno.
Es sólo un ejemplo, pero ahora ambos hemistiquios son heroicos y el ritmo ya no se atropella. También podemos desplazar la cuarta y quinta sílaba un lugar hacia atrás y hacer que ambos hemistiquios sean melódicos:
Era una brumosa - velada fría de invierno.
Era una brumosa - noche fría del invierno.
Son cuestiones harto molestas, pero de ello depende que el verso tenga ritmo.
En el tercer verso el ritmo también se frena porque el primer hemistiquio es melódico y el segundo es heroico. Vamos a volverlos ambos melódicos, aunque se perderá la rima:
No podía dejar de - pensar en esa noche
No podía dejar de - recordar la velada
Espero no te molestes, pero hay hermosa visiones (o noches de pasión) que se pierden por no cuidar la métrica. Hay poetas que tienen métricas perfectas por puro instinto, pero hay poetas como yo que tienen que ponerse a hacer las matemáticas y contar con los dedos, y luego el vicio ya no se quita jajaja.
En un primer momento pensé que el verso era demasiado largo, pero es un pentadecasílabo en toda regla, dividido naturalmente en hemistiquios de 7 y 8 sílabas. Luego pensé que el problema eran los mismos hemistiquios, pero el primero es un heptasílabo melódico pleno (jerga aburrida) y el segundo un octosílabo heroico puro (más jerga aburrida). Al final el problema era que los versos melódicos y heroicos no armonizan del todo bien: Mira cómo cambia si desplazamos un lugar las dos primeras sílabas tónicas:
Era una brumosa - velada fría de invierno.
Y aquella tan brumosa - velada fría de invierno.
Es sólo un ejemplo, pero ahora ambos hemistiquios son heroicos y el ritmo ya no se atropella. También podemos desplazar la cuarta y quinta sílaba un lugar hacia atrás y hacer que ambos hemistiquios sean melódicos:
Era una brumosa - velada fría de invierno.
Era una brumosa - noche fría del invierno.
Son cuestiones harto molestas, pero de ello depende que el verso tenga ritmo.
En el tercer verso el ritmo también se frena porque el primer hemistiquio es melódico y el segundo es heroico. Vamos a volverlos ambos melódicos, aunque se perderá la rima:
No podía dejar de - pensar en esa noche
No podía dejar de - recordar la velada
Espero no te molestes, pero hay hermosa visiones (o noches de pasión) que se pierden por no cuidar la métrica. Hay poetas que tienen métricas perfectas por puro instinto, pero hay poetas como yo que tienen que ponerse a hacer las matemáticas y contar con los dedos, y luego el vicio ya no se quita jajaja.
Bardo