23/06/2016 06:57 AM
Bueno, tras la explicación de los Coros Celestiales, ahora toca la otra cara de la moneda, los diablos. Voy a poner una breve explicación de como los veo yo. Decidme si os gusta como ha quedado todo los de los Coros Celestiales y los diablos y si se ve bien cohesionado o no os gusta por favor. Por cierto, mola lo de este nuevo apartado o subforo que nos han hecho, parece muy cómodo.
Diablos:
Un diablo es un mago que ha entrado en contacto en algún momento de su existencia, ya sea mediante visiones o mediante contacto visual indirecto, con un ángel caído y éste le ha transmitido parte de su esencia, otorgándole así ciertas maldiciones a su cuerpo o espíritu, como una apariencia monstruosa, una enfermedad incurable, una fuerza sobrenatural, una sed de sangre irresistible o una capacidad de canalización mágica anormal. Por tanto, a partir de ese momento el alma egoísta del desgraciado mago será pervertida con deseos ilimitados de sangre, lujuria, ira, desobediencia, odio, avaricia, orgullo o envidia; conduciéndole hacia el ansía de poder por encima de todo ya que con él podrá lograr que cese el dolor y que los demás seres hagan lo que él desee, consiguiendo así una sensación de control del mundo que le llevará a sentirse más cerca de la divinidad. Tanto es así, que su maldición le condenará definitivamente a la autodestrucción propia y también a la destrucción de todo lo que esté a su alcance o bajo su control.
Los diablos no se estructuran en forma de organización tal y como ocurre con los Coros Celestiales, si no que simplemente su forma de existencia es la anarquía, no el orden. A causa de ello su única regla es que los más débiles se dejan guiar por los más fuertes y que cada individuo debe cuidar de sí mismo y no responde de sus acciones ante nada ni nadie. Es por ello que aunque a veces distintos diablos se unen bajo el estandarte de un diablo que es considerado todopoderoso, normalmente las distintas sectas de los diablos, conocidas como orgías, están formadas por un solo diablo que es más poderoso que un mago normal y cientos de seguidores, conocidos como flagelantes, que tan solo le siguen porque están fascinados por su poder, porque le temen o porque desean fervientemente un modo de vida descontrolado, sin límites y sin gobierno que les permita dar rienda suelta de forma desenfrenada a sus taimadas obsesiones sin recibir un castigo por parte de la sociedad en la que se encuentran.
Las orgías más famosas que han existido a través de la historia son: Tempestades, Incriminadores, Amdusias, Prestidigitadores, Satanes, Vengadores, Insidiosos, Sierpes, Furias e Iniquidades. La mayoría se formaron durante la época de la veneración a los ángeles y ya no existen en la actualidad. La mayoría de las orgías se crean al nacer un nuevo diablo y se disuelven al morir dicho diablo.
Diablos:
Un diablo es un mago que ha entrado en contacto en algún momento de su existencia, ya sea mediante visiones o mediante contacto visual indirecto, con un ángel caído y éste le ha transmitido parte de su esencia, otorgándole así ciertas maldiciones a su cuerpo o espíritu, como una apariencia monstruosa, una enfermedad incurable, una fuerza sobrenatural, una sed de sangre irresistible o una capacidad de canalización mágica anormal. Por tanto, a partir de ese momento el alma egoísta del desgraciado mago será pervertida con deseos ilimitados de sangre, lujuria, ira, desobediencia, odio, avaricia, orgullo o envidia; conduciéndole hacia el ansía de poder por encima de todo ya que con él podrá lograr que cese el dolor y que los demás seres hagan lo que él desee, consiguiendo así una sensación de control del mundo que le llevará a sentirse más cerca de la divinidad. Tanto es así, que su maldición le condenará definitivamente a la autodestrucción propia y también a la destrucción de todo lo que esté a su alcance o bajo su control.
Los diablos no se estructuran en forma de organización tal y como ocurre con los Coros Celestiales, si no que simplemente su forma de existencia es la anarquía, no el orden. A causa de ello su única regla es que los más débiles se dejan guiar por los más fuertes y que cada individuo debe cuidar de sí mismo y no responde de sus acciones ante nada ni nadie. Es por ello que aunque a veces distintos diablos se unen bajo el estandarte de un diablo que es considerado todopoderoso, normalmente las distintas sectas de los diablos, conocidas como orgías, están formadas por un solo diablo que es más poderoso que un mago normal y cientos de seguidores, conocidos como flagelantes, que tan solo le siguen porque están fascinados por su poder, porque le temen o porque desean fervientemente un modo de vida descontrolado, sin límites y sin gobierno que les permita dar rienda suelta de forma desenfrenada a sus taimadas obsesiones sin recibir un castigo por parte de la sociedad en la que se encuentran.
Las orgías más famosas que han existido a través de la historia son: Tempestades, Incriminadores, Amdusias, Prestidigitadores, Satanes, Vengadores, Insidiosos, Sierpes, Furias e Iniquidades. La mayoría se formaron durante la época de la veneración a los ángeles y ya no existen en la actualidad. La mayoría de las orgías se crean al nacer un nuevo diablo y se disuelven al morir dicho diablo.
"El pasado nunca deja de perseguirnos."